Los partidos libaneses finalmente han llegado este martes a un acuerdo para reformar la ley electoral vigente, que data de 1960, según ha anunciado el ministro de Asuntos Exteriores, Gebran Bassil, zanjando así la última crisis política en el país.
“Hoy hemos llegado a un acuerdo político”, ha dicho Bassil. De acuerdo con la televisión libanesa LBCI, una comisión ministerial se encargará de dar su visto bueno a la nueva ley electoral este mismo martes para que sea ratificada en la reunión de Gobierno del miércoles.
El borrador consensuado incorpora la representación proporcional, divide el Líbano en 15 distritos electorales –dos para Beirut–, reserva seis escaños para los expatriados, los autoriza a votar e impone un porcentaje mínimo de votos para entrar en el Parlamento, entre otras cosas, según informa Naharnet.
Además, conforme recoge la prensa local, el presidente, Michel Aoun, y el primer ministro, Saad Hariri, habrían pactado ya una fecha para las próximas elecciones, si bien este extremo no está confirmado. El ministro de Interior, Nouhad Machnouk, ha indicado que para organizar los comicios se necesitarán al menos siete meses.
El acuerdo sobre la ley electoral ha acabado con una crisis política que amenazaba con dinamitar el acuerdo que facilitó la designación de Aoun como presidente, después de más de dos años de vacío. Los partidos llevan meses negociando la reforma, para lo cual tenían como fecha límite el 20 de junio, cuando expira el mandato del Parlamento.
El Líbano nunca ha estado sin una sede legislativa operativa pero el actual Congreso ya ha extendido su mandato dos veces desde que comenzó su andadura, en 2009, por el desacuerdo entre los partidos en torno a la ley electoral y otras cuestiones.
El Parlamento libanés reparte los 128 escaños que lo conforman entre las comunidades cristianas y musulmanas del país, conforme al acuerdo de Taif, que acabó con la guerra civil que arrasó el país entre 1975 y 1990.