El Líbano celebró hoy su primera jornada de elecciones municipales con una afluencia baja a las urnas, según los datos facilitados por el Ministerio del Interior.
A las 6 de la tarde, el índice de participación de los comicios, que se celebraban solamente en Beirut y el Valle de la Bekaa, era del 17,76 por ciento en la capital libanesa y de entre el 34 y el 50 por ciento en la Bekaa, según las poblaciones.
La jornada se desarrolló de forma relativamente tranquila. En la localidad de Zahle, la principal ciudad de la Bekaa, se produjeron incidentes por enfrentamientos entre las diferentes listas que concurrían a los comicios a causa de una presunta compra de votos.
En Beirut, la principal lucha por la alcaldía era entre la “Lista de los beirutíes” y “Beirut medinati” (Beirut mi ciudad).
La primera está apadrinada por el Partido Futuro, del ex primer ministro libanés Saad Hariri, que domina el consejo municipal de la capital y está apoyada por los partidos políticos tradicionales.
La segunda es una lista nueva surgida de un movimiento que nació el verano pasado a raíz de la profunda crisis que provocó el cierre del principal vertedero del país, Naameh.
La compañía que gestiona la recogida de basuras en la zona, Suklin, suspendió la recolección de desechos y estos empezaron a amontonarse en las calles. Como consecuencia, el hedor en Beirut y otras localidades afectadas era insoportable.
Los dirigentes políticos negociaban contratos con las empresas de recogida de basuras y algunos activistas y personas de diversos sectores sociales empezaron a denunciar la corrupción existente.
Así nació el movimiento “You Stink” (Apestáis), que comenzó protestando por la cuestión de los deshechos y acabó manifestándose por la corrupción arraigada en el Líbano y presente en todas las instituciones.
“El gobierno funciona como una mafia. Si ves “El Padrino”, entiendes cómo funciona la política libanesa”, señaló a Sputnik Nóvosti Lucien Bourjeily, director de teatro de Beirut y uno de los impulsores de “You Stink”.
Para Bourjeily, “hace muchos años que los libaneses saben que hay corrupción, pero cada partido en el Líbano tiene su canal de televisión en el que cargan contra la corrupción de los demás, no contra la suya”.
Para desviar la atención de estas cuestiones, este director de teatro asegura que los políticos activan “el botón del sectarismo con discursos incendiarios”.
“La realidad no es la que venden los políticos, lo que nos importa no es a qué comunidad pertenecemos, no nos queremos comer los unos a los otros”, dijo Bourjeily.
“Queremos una vida con un trabajo decente, no vivir en medio de la basura, no tener cortes de electricidad, contar con derechos básicos, igualdad ante la ley, igualdad para las mujeres y derechos civiles”, subrayó.
Estas aspiraciones, entre otras, son las que tiene “Beirut medinati”, una lista paritaria de 12 mujeres y 12 hombres, encabezada por la directora de cine Nadine Labaki, e integrada por académicos, artistas, médicos, arquitectos y activistas.
Rechazan el sectarismo, la corrupción, y proponen recuperar los espacios públicos, mejorar el transporte, resolver el problema de los residuos basándose en la sostenibilidad y respetando el medioambiente y preservar el patrimonio cultural de Beirut.
“Hoy es un momento decisivo para poder hacer en Beirut todo aquello que soñamos”, afirmó Labaki. “Hemos cantado a Beirut, hemos grabado películas en Beirut, ha llegado la hora de trabajar por Beirut. Hoy no nos podemos quedar en casa y lamentarnos mañana por no haber votado. Hoy tenemos la oportunidad de cambiar”, agregó la cineasta.
La de hoy era la primera jornada de los comicios municipales, que se desarrollarán en cuatro domingos por regiones y acabarán el 29 de mayo. Estas son las primeras elecciones que se celebran en el Líbano en seis años.