Las elecciones han sido pospuestas tres veces en el Líbano desde 2013. Como resultado, votantes aptos de entre 21 y 28 años nunca han tenido oportunidad de votar
Días después de que unos 2,000 manifestantes se reunieran frente al palacio gubernamental en Beirut el 19 de marzo para protestar contra una propuesta para aumentar los impuestos, el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, anunció que las elecciones se retrasarán, otra vez.
Hassan Chamoun, reportero gráfico y miembro del muy exitoso movimiento anticorrupción ‘‘Apestas’, sostuvo que la propuesta de aumento tributario es un intento de distraer al pueblo libanés de la prórroga electoral. En conversación con Global Voices, dijo.
Las elecciones se debieron haber realizado en junio de 2013, pero el Parlamento amplió su propio término por 17 meses por ‘razones de seguridad’. Luego, en noviembre de 2014, citando la necesidad de decidir una nueva ley electoral antes de votar, el Parlamento postergó las elecciones para 2017. Esta vez, el gobierno dice que la prórroga es por ‘razones técnicas’, pero en realidad el Parlamento ha llegado a un punto muerto sobre la nueva ley electoral.
Para poner esto en perspectiva, un ciudadano libanés de 28 años todavía no ha votado por el parlamentario de su elección a pesar de estar autorizado legalmente a votar desde los 21 años.
El gobierno sostiene que el aumento en los impuestos es necesaria para financiar las remuneraciones de los trabajadores del sector público. Tanto Dagher como Chamoun están de acuerdo en que el llamado del primer ministro Saad Hariri a los manifestantes en Twitter fue un ardid publicitario y un paso estratégico con el fin de distraer al público.