El presidente del Líbano, Michel Aoun, culpa a las ‘políticas internacionales’ de los conflictos en el Oriente Medio, sobre todo, en Siria.
“Las políticas internacionales han llevado a la región donde está ahora. Si quieren la paz, hay que apagar el fuego que lo originó porque no se apaga cuando es alimentado”, ha denunciado este martes el mandatario libanés.
En declaraciones realizadas en un encuentro sostenido con el cuerpo diplomático, Aoun ha advertido de que su país “no vive al margen de su entorno” y mucho menos es inmune a la crisis que agobia a la región, según reportó la agencia oficial.
En esta línea, ha destacado que también el Líbano podría ser víctima de las crisis mundiales, al tiempo que destacó la importancia de la cooperación y el diálogo para evitar que su país se convierta en víctima de lo que ocurre en otras partes de la región.
El Líbano, ha insistido, debe seguir siendo un “ejemplo de convivencia”, puesto que el futuro del mundo está en las “sociedades pluralistas”, pese a todas las discrepancias.
“Deseo como presidente consagrar la fórmula libanesa que se basa en la pluralidad y que demostró su capacidad para superar los retos, garantizar la estabilidad política, social y la seguridad”, explica.
Desde 2001, Siria vive sumida en un conflicto desencadenado por grupos armados y terroristas, una guerra que, de hecho, ha dejado hasta el momento unos 400 mil muertos según estima el enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Siria, Staffan de Mistura.
La mayor parte de los grupos armados y el Gobierno de Damasco tienen previsto tomar parte en unas conversaciones de paz en Astaná (capital de Kazajistán) el próximo 23 de enero, propiciada con la mediación de Irán, Rusia y Turquía.