El ministro de Exteriores canadiense, Stéphane Dion, ha anunciado en el Líbano una ayuda suplementaria de ocho millones de dólares a este país, para ayudar a las autoridades a hacer frente a los gastos derivados de la llegada masiva de refugiados.
En una entrevista al diario L’Orient Le Jour, el ministro indicó que este aporte, además, tiene como objetivo “comprometer a las mujeres libanesas y sirias con la estabilidad social, aportar una ayuda al ejército libanés para que pueda proteger las fronteras con Siria, obrar contra la radicalización de los jóvenes y mejorar la gestión en las prisiones del país”.
Esta cantidad se suma a los 193 millones que ya ha concedido Canadá al pequeño país mediterráneo desde el comienzo de la guerra civil siria.
El Líbano acoge 1.100.000 refugiados sirios según la ONU, una cifra que las autoridades locales elevan a entre 1.500.000 y 2.000.000, a los que se suman medio millón de refugiados palestinos.
“El Gobierno del primer ministro Justin Trudeau apoya a los refugiados sirios y palestinos en el plan de la ayuda básica (agua potable y salud) y la educación, a la que le concedemos una gran importancia”, agregó Dion.
Además, insistió en que su país “intensifica los esfuerzos para que los refugiados sirios puedan regresar a sus casas cuando cese la violencia”.
El responsable canadiense que ha visitado un campo de refugiados sirio y otro palestino aseguró que Canadá ha acogido a 35.000 sirios, la mitad de ellos procedentes del Líbano.
“Esto no resuelve el problema, pero forma parte de la solución. El Líbano soporta un peso con gran generosidad”, declaró.