Jerusalén, al fin y al cabo, será la capital compartida de los dos estados, israelí y palestino, dijo el lunes el ministro de Relaciones Exteriores de la Gran Bretaña, Boris Johnson, a su homólogo palestino, Riyad al-Malki, según un comunicado emitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores.
“Reafirmé el compromiso del Reino Unido de apoyar al pueblo palestino a una solución de dos estados, a la necesidad urgente de nuevas negociaciones de paz, y la postura tradicional y clara del Reino Unido sobre el estado de Jerusalén”, dijo. Boris Johnson.
“Debe ser determinado por un acuerdo negociado entre israelíes y palestinos, en última instancia, con Jerusalén como capital compartida de los estados, israelí y palestino”, agregó el secretario del Exterior.
Israel conquistó Jerusalén Oriental, la parte árabe de la ciudad, durante la Guerra de los Seis Días en 1967 y luego la anexó, proclamando que la ciudad reunificada era su capital, una decisión no reconocida por la comunidad internacional. Los palestinos quieren hacer de Jerusalén Oriental la capital de su futuro estado.