El Líder de Hezbolá, Seyed Hasan Nasrolá, alaba la resistencia de los libaneses ante Israel, al cual advierte de que sufrirá más derrotas si repite sus agresiones.
“Las fuerzas de Resistencia resultaron victoriosas en la Guerra de los 33 días pese a que el enemigo sionista disponía de todos los armamentos”, así lo ha afirmado este domingo el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano (Hezbolá), en un discurso televisado ofrecido con motivo del 11º aniversario de la victoria libanesa en la guerra lanzada por Israel en 2006.
Tras felicitar al pueblo libanés y los familiares de los mártires, Nasrolá ha recordado que la victoria se debió a la paciencia, firmeza y fe de los combatientes de Hezbolá.
El máximo responsable del grupo de Resistencia ha asegurado que ahora sus fuerzas están listas para hacer frente a cualquier acto de agresión, advirtiendo de que en caso de una nueva guerra israelí, el régimen de Tel Aviv recibirá una respuesta “100 veces” más dura de la que sus fuerzas experimentaron durante la guerra de 2006.
“Derrota y humillación fue lo que se ganó el enemigo israelí en el año 2006, y en caso de una nueva guerra, volverán a ganárselas”, ha subrayado.
Nasrolá ha apostillado que los propios israelíes han reconocido la gravedad de su fracaso y los contraataques de los libaneses. “Cada vez que un funcionario israelí se refiere al creciente poderío de Hezbolá, admite la derrota israelí en el verano de 2006”, ha recalcado.
El jefe de Hezbolá agregó que no sólo Israel, sino todos aquellos grupos o países que hoy día buscan eliminar al movimiento libanés llevarán a la tumba su deseo. En esta línea, ha hecho énfasis en que Hezbolá se encuentra más fuerte y consolidado que nunca, para luego mencionar los recientes triunfos cosechados por Hezbolá sobre los grupos terroristas en los altos de Arsal, límítrofe con Siria.
A raíz de su incapacidad de librar una nueva guerra con El Líbano, ha enfatizado, Tel Aviv pretende castigar colectivamente a toda la nación libanesa presionando a la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump.
Unos 1200 libaneses, en su mayoría civiles, perdieron la vida durante la ofensiva israelí que duró 33 días contra El Líbano. El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) aprobó la Resolución 1701, que puso fin al conflicto llamando al régimen israelí a respetar la soberanía y la integridad del territorio libanés.