Beirut, 2 jul (PL) El movimiento de Resistencia libanés Hizbulah destruyó posiciones de terroristas del Estado Islámico (EI) que estaban atrincherados en la periferia de Ras Baalbek y Al-Zwaytineh, poblados fronterizos con Siria, reportó hoy el canal Al-Manar TV.
De acuerdo con la televisora afín a Hizbulah (Partido de Dios, en árabe), sus unidades de artillería bombardearon las dos posiciones durante un ataque que infligió numerosos muertos y heridos a los extremistas que tienen sus bases logísticas en el lado sirio de la frontera.
Las acciones del también llamado Partido de la Resistencia se produjeron seis días después de la serie de atentados suicidas que causaron cinco muertos y más de 30 heridos en la aldea predominantemente cristiana de Qaa, en el extremo noreste del valle de la Bekaa, también limítrofe con Siria.
Fuentes militares y de seguridad señalaron que takfiristas (terroristas islámicos sunnitas) del EI y del Frente al-Nusra están atrincherados en áreas montañosas a lo largo de la frontera sirio-libanesa, a pesar de que el Ejército de este país bombardea con frecuencia sus campamentos.
Además, Hizbulah y el Ejército sirio leal a Damasco también mantienen una ofensiva contra esas agrupaciones dentro del vecino país.
Entretanto, los aparatos de seguridad de El Líbano afirmaron que mantienen la vigilancia de los asentamientos y campamentos de refugiados sirios, a la par que continúan las redadas que en la semana por concluir condujeron a la detención de más de 500 personas de ese origen.
Las autoridades creen que entre los desplazados sirios hay personas que proveen albergue para miembros del DAESH, acrónimo árabe de EI, y otros grupos extremistas islámicos.
De hecho, fuerzas de seguridad dijeron a medios locales que hace dos meses obtuvieron información, según la cual, los hombres del DAESH en la ciudad siria de Raqqa habían decidido aprovechar la frágil situación política en esta nación para intensificar sus operaciones.
Sin embargo, oficiales citados este sábado por el periódico Al-Joumhouria aseveraron que “la situación está totalmente bajo control, aunque advirtieron de que se debe mantener la vigilancia”.
“Los campamentos de refugiados sirios son una bomba de tiempo. Hay reportes de órganos oficiales que alertan de que los asentamientos y los lugares de concentración de sirios amenazan la suerte de El Líbano y su unidad”, comentó un funcionario no identificado a dicho diario.
En ocasión del Día Internacional Al-Quds (de solidaridad con Jerusalén), el secretario general de Hizbulah, jeque Hassan Nasrallah, también ofreció ayer garantías de que la situación nacional de seguridad “está bajo control”Â�.
A pesar del temor generalizado en el país por los atentados suicidas de Qaa y la revelación de al menos dos complots terroristas frustrados en días recientes, Nasrallah se basó en investigaciones de seguridad para rechazar las sospechas gubernamentales de que los sirios estuvieron involucrados.
“Todos los indicios sugieren que los atacantes suicidas no vinieron de los campamentos de refugiados (de los alrededores de Qaa), sino más bien de los puestos del DAESH en las afueras de (la aldea cercana de) Arsal”, remarcó.