El estallido de una poderosa bomba en Beirut el domingo destruyó varios automóviles, dañó severamente las oficinas centrales de uno de los mayores bancos del Líbano y dejó un herido.
La bomba fue colocada bajo un auto, indicó la estatal National News Agency. Nohad Machnouk, ministro libanés del Interior, confirmó el reporte en declaraciones a la televisora privada LBC, pero no dijo si el atentado tenía un blanco concreto.
La explosión ocurrió pocos minutos después de que los habitantes se sentaran a la mesa para el iftar, la cena que corta el ayuno diario para los musulmanes practicantes en el mes sagrado del Ramadán, cuando las calles de áreas predominantemente islámicas como Verdun suelen estar vacías.
En los últimos años Líbano ha registrado consecuencias violentas por la guerra civil en la vecina Siria, y las autoridades libanesas han estado en alerta alta y han intensificado la seguridad.
La explosión del domingo es la primera que sacude Líbano desde noviembre, cuando dos ataques suicidas vinculados golpearon un suburbio del sur de Beirut considerado un bastión del grupo chiita Hezbolá, lo que dejó 43 muertos. Ese ataque se lo atribuyó el grupo Estado Islámico. Hezbolá ha enviado miles de sus combatientes a Siria para luchar al lado de las fuerzas del presidente sirio Bashar Assad.
El ataque del domingo parece diferente de atentados explosivos previos, diseñado para ocasionar una cifra mínima de muertes. La bomba fue colocada en la parte trasera de las oficinas del banco BLOM, el segundo más grande de Líbano. Destrozó la fachada de cristal y dañó autos y edificios cercanos.
El banco BLOM ha sido criticado por algunos políticos partidarios de Hezbolá por tomar una posición dura después de que bancos libaneses comenzaron a acatar una ley estadounidense que sanciona hacer negocios con el grupo combatiente. Las autoridades dicen que decenas de cuentas bancarias relacionadas a organizaciones del Hezbolá han sido cerradas en semanas recientes.
Saad Azhari, director del banco BLOM, dijo que nadie debe apresurarse a sacar conclusiones respecto al responsable del ataque.
“Nosotros estamos interesados en ser un banco serio que sirva a los intereses de todos (los libaneses). No tomamos medidas para perjudicar a ningún grupo en particular”, dijo a reporteros en el lugar de la explosión.