El ministro de Exteriores del Líbano, Gebran Bassil, ha expresado este martes su respaldo a la extensión del mandato de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL), resaltando que “es necesario para la paz y la estabilidad”.
“Preservar el mandato de la FINUL es necesario para la paz y la estabilidad. En caso contrario, se pondrán en peligro los esfuerzos de la ONU”, ha indicado Bassil en un breve mensaje publicado en su cuenta en la red social Twitter.
La FINUL fue desplegada en el país después del conflicto de 2006 entre Israel y el partido-milicia chií libanés Hezbolá, que duró poco más de un mes y que se saldó con la muerte de unas 1.200 personas en Líbano –la mayoría civiles– y 160 israelíes –la mayoría soldados–, así como con importantes daños materiales en el país árabe.
La resolución 1701 pide el fin del conflicto, la retirada de las tropas israelíes del Líbano y el despliegue en el sur del país de las fuerzas libanesas y de la propia FINUL.
Asimismo, contempla el desarme de todos los grupos armados en el Líbano, lo que implica a Hezbolá, y que no haya otras fuerzas armadas ajenas a las de la FINUL y el Líbano al sur de río Litani, lo que implica tanto a Israel como al partido-milicia.
La resolución reitera además el respaldo total del Consejo de Seguridad al respeto de la Línea Azul y la independencia de la integridad territorial y la soberanía del país árabe.
Recientemente han aumentado las tensiones diplomáticas entre Israel y Líbano debido al cruce de declaraciones entre altos cargos del Gobierno israelí y del partido-milicia.