El presidente de la República, General Michel Aoun, destacó este lunes que “la religión cristiana no sucumbe ante los tanques, cañones y aviones, sino ante el poder del dinero y el miedo a esas armas”.
“la disminución en el número de los cristianos en los países de la región no se debe únicamente a las guerras, sino que también a la falta de su presencia en la administración publica”.
La postura de Aoun se produjo al recibir en el Palacio de Baabda a una delegación del Comité Ejecutivo del Consejo de Iglesias de Oriente Medio en el Líbano, integrada por el patriarca de Antioquía y todo el Oriente de la Iglesia ortodoxa de Antioquía Juan X Yazigi, el patriarca sirio ortodoxo, Ignacio Efrén II, representantes de diferentes comunidades cristianas en el Oriente Medio y el secretario general del Consejo, el padre Michel Jalakh.
Aoun señaló que “estamos viviendo una crisis existencial en Oriente Medio. Los cristianos en Tierra Santa representaban antes el 20% de los palestinos, hoy día, ese porcentaje se ha reducido al 1 o 1,5%. En Irak, el número de ellos se redujo de un millón 200 mil a casi 300,000. En Siria, no sabemos aún el número de los desplazados, mientras que la emigración en el Líbano va en aumento”.
Aoun añadió: “Tenemos que observar este asunto de forma excepcional. Si perdemos nuestra presencia política, perdemos todo, porque ella es la que nos protege. De aquí nuestra larga batalla, porque fueron muy pocos aquellos que entendieron esto en sus verdaderos significados a largo plazo”. “Estamos en el inicio de un Ascenso, y queremos que todas las iglesias ascienden con nosotros”
“El cristianismo existe en sí y no viene del exterior, y cuando el ser humano pierde su fe cristiana y mira hacia el exterior, entonces peligrara su existencia. La religión cristiana no sucumbe ante los tanques, cañones y aviones, sino ante el poder del dinero y el miedo a estas armas. Los primeros apóstoles fueron predicando a Cristo sin miedo, pese a la caída de muchos mártires”.
“Algunos políticos objetaron el concepto y significado del martirio y lo interpretaron como una cultura de la muerte, lo cual no es cierto. La cultura de la redención es una cultura cristiana que nos ha encomendado Cristo para redimir a nuestros hermanos, y esto es exactamente lo que hizo. Para permanecer vivos debemos perder el miedo”, finalizó