Los traficantes llevan a los desplazados por el valle de la Bekaa, donde se han desplomado las temperaturas.
Los cuerpos sin vida de dos varones sirios han sido localizados este sábado en la Bekaa libanesa, región fronteriza con Siria. Con ellos suman ya 15 los sirios que han perdido la vida en las últimas 48 horas intentando huir de la vecina guerra para buscar refugio en Líbano.
Las rutas de tráfico humano atraviesan las montañas del valle de la Bekaa, rodeando el puesto fronterizo de Masnaa, donde precisamente esta semana se ha registrado una importante caída de las temperaturas tras que una tormenta de nieve azotara el país.
Murieron congelados por el frío. Entre los cuerpos hay dos niños y seis mujeres”, dijo en un comunicado Georges Abou Moussa, jefe de operaciones de la Defensa Civil Libanesa a cargo de la misión para recuperar los cuerpos.
Las tropas libanesas también se han sumado a las labores de rescate ya que temen que en los próximos días se descubran más cuerpos sin vida. Según la cadena de televisión local LBC, el grupo fue abandonado por los traficantes al estallar una tormenta. Dos de estos traficantes han sido arrestados y al menos seis sirios han sido rescatados con vida, entre ellos una mujer embarazada.
La Agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR) ha emitido un comunicado este viernes expresando su angustia por las muertes y ha llamado a los países a “permitir un pasaje seguro a aquellos que tratan de entrar en busca de protección”.
El pasado mes de diciembre, ACNUR anunció que el número de refugiados sirios registrados en Líbano había caído por debajo del millón por primera vez desde 2014.
Una baja que se explica en parte por aquellos que han viajado a terceros países, y un número más reducido que ha comenzado un regreso a cuenta gotas a aquellas zonas de Siria donde se han acallado los combates.