Putin aseveró en entrevista a Bloomberg que se avanza poco a poco en la buena dirección y no descartó que puedan anunciar pronto un acuerdo a la comunidad internacional.
No obstante, Putin admitió que la principal dificultad de las conversaciones sigue radicando en determinar qué grupo forma parte de la oposición al Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Assad, y cuál es terrorista.
Para el presidente ruso, los grupos terroristas, incluido el Frente Fatah al-Sham, al que EE.UU. considera moderado, empiezan a absorber a la parte sana de la oposición.
“Ya no es una guerra civil. Son combatientes venidos del exterior que reciben armamento y municiones del extranjero”, aseguró Putin.
El Kremlin advirtió a EE.UU. de las consecuencias adversas de coquetear con el antiguo grupo Frente Al-Nusra, que lucha junto con otros grupos armados y terroristas para derrocar al Gobierno de Al-Assad.
