Marines estadounidenses se desplegaron en la ciudad Raqqa, al norte de Siria, y establecieron un puesto de avanzada desde el cual pueden disparar armas de artillería en presunto apoyo a la lucha para recuperar la ciudad de manos de ISIS, reportó The Washington Post.
Lo cierto es que la aparición de estas tropas marca una nueva escalda en la guerra de los Estados Unidos en Siria. La nueva misión llega mientras la administración Trump planea recuperar Raqqa, lo que incluye más tropas de operaciones especiales y helicópteros de ataque.
Los marines desplegados en Siria incluyen parte de una batería de artillería que puede disparar proyectiles de 155 milímetros de M777 Howitzers.
Según funcionarios que pidieron el anonimato, la unidad expedicionaria, Batallón del Equipo de Aterrizaje 1er Batallón, 4º Infantería de marina, manejará las armas y entregará el apoyo del fuego para las fuerzas locales que están preparando un asalto en la ciudad. Mientras soldados de infantería adicionales de la unidad proporcionarán seguridad y permitirán reabastecimientos de elemento logístico de combate.
