El gobierno israelí aprobó un proyecto de ley para legalizar de forma retroactiva los asentamientos temporales en la ocupada Cisjordania.
Los “outpost” es el nombre que se da a las construcciones temporales levantadas en propiedades palestinas, que además de ser ilegales para la comunidad internacional, lo son también en la normativa israelí porque carecen de permisos.
Medios israelíes alegaron que la propuesta se ha llevado a votación pese a la objeción del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
Sin embargo, la presión de las autoridades israelíes llevó a incluir finalmente el proyecto, que, de aprobarse en el parlamento, evitaría la evacuación de la colonia de Amona y reconocería otras colonias similares actualmente ilegales para Tel Aviv.
Según la ONG israelí Yesh Din, esta aprobación revela que el gobierno asumió el papel de legislador en Cisjordania y pone en evidencia su intención de anexar sin asumir los derechos civiles de sus residentes.