ISIS solo domina ahora 20 kilómetros de los 120 que ocupaba en el Líbano

Beirut, 22 ago (EFE).- El ejército libanés realizó hoy grandes progresos en el noreste del país para expulsar al grupo yihadista Estado Islámico (EI), en el cuarto día de la ofensiva lanzada en las zonas montañosas que dominaban los extremistas.

El responsable de información de las Fuerzas Armadas, Ali Kanso, afirmó que “el ejército libanés recuperó hoy 20 kilómetros cuadrados, con lo que asciende a 100 kilómetros cuadrados el terreno arrebatado” a ISIS.

El grupo terrorista controlaba las alturas de Ras Baalbeck y Qaa, regiones de mayoría cristiana localizadas en el noreste del Líbano y limítrofes con Siria, pero ahora solo domina “20 kilómetros de los 120 que ocupaba”, dijo el portavoz.

Durante su comparecencia ante la prensa, Kanso mostró vídeos y fotos de las posiciones recuperadas y los túneles subterráneos horadados por los yihadistas en esas zonas, por donde huyeron dejando armas y municiones, indicó.

“Nuestras unidades controlan los frentes en los ‘Yarud’ hasta la frontera entre el Líbano y Siria, y destruyeron las posiciones terroristas. Algunos murieron y otros huyeron”, agregó.

“Continuaremos la lucha hasta el límite de la frontera con Siria”, aseguró.

Respecto a los nueve policías y soldados en manos de ISIS desde agosto de 2014, declaró: “Hasta ahora no tenemos ninguna información al respecto, pero el ejército no los olvida en ningún momento, pues esta cuestión es prioritaria”.

Señaló que si no logran saber el paradero de los militares una vez que terminen la operación “El amanecer del Yurud”, tomarán las medidas pertinentes, aunque no dio más detalles al respecto.

El ejército libanés aseguró en su cuenta oficial de Twitter que han logrado su “objetivo”, es decir, “controlar por completo la parte septentrional” de la zona bajo el dominio de ISIS hasta la frontera siria.

Según los uniformados, fueron abatidos alrededor de “diez elementos del Estado Islámico ISIS”, tras “enfrentamientos directos o bombardeos de artillería o aéreos”.

Por otro lado, unidades de ingeniería del ejército continúan inspeccionando los puntos liberados con el fin de “limpiar de minas, munición y artefactos sospechosos” el terreno, así como para abrir “nuevos caminos”.

Las unidades castrenses renovaron hoy la operación militar después de que este lunes se viviera una relativa calma en el lugar, puesto que las fuerzas libanesas se dedicaron a asegurar el terreno recuperado.

Esta mañana el ejército informó de que un militar murió y otros cuatro resultaron heridos cuando explotó una bomba que estaban desactivando en la localidad de Uadi el Jechem, en las montañas de Arsal, en la misma región.

Los heridos más graves fueron transportados en helicópteros, con la ayuda de la Cruz Roja Libanesa, a hospitales de Beirut y otros a centros médicos de la zona.

A finales del pasado mes de julio, el grupo chií Hizbulá desarrolló una ofensiva en esa zona fronteriza, donde había una presencia destacada del Organismo de Liberación del Levante (alianza de la exfilial siria de Al Qaeda), y consiguió recuperar el control de la misma tras una semana de combates y gracias a la retirada acordada con sus enemigos.

Los extremistas de la exfilial de Al Qaeda y los rebeldes de Saraya Ahl al Sham (perteneciente al Ejército Libre Sirio) fueron evacuados de la región libanesa de Arsal, junto a sus familiares y otros civiles, tras acordar un alto el fuego con Hizbulá.

En paralelo, el grupo chií lanzó el pasado sábado una ofensiva, apoyada por las fuerzas gubernamentales sirias, para derrotar a los yihadistas en Al Qalamún Occidental, ubicado en Siria y fronterizo con el Líbano.

El ejército dejó claro el primer día del lanzamiento de la ofensiva que no estaban coordinados con Hizbulá ni con Siria en las operaciones militares que se están llevando a cabo en el territorio libanés.