08 mayo 2024 – 20:08
Beirut, 8 may (EFE).-
Las autoridades libanesas anunciaron este miércoles nuevas medidas contra los refugiados sirios residentes en el país, incluida la salida de todos aquellos que no tengan sus papeles en regla y la suspensión de varios tipos de permisos de residencia para la comunidad. En un comunicado, la Dirección de la Seguridad General pidió a los ciudadanos sirios “que violan el sistema de entrada y residencia” que acudan a los centros de frontera “para regularizar su situación y abandonar el territorio libanés, bajo pena de medidas legales apropiadas contra aquellos que no se vayan”. El mes pasado, el ministro de Interior libanés, Bassam Maulaui, aseguró que solo unos 300.000 de casi dos millones de sirios presentes en el país cuentan con residencia legal, mientras que algo más de 800.000 están registrados con la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR). El Líbano, que lleva años buscando el retorno de los refugiados a Siria, endureció su postura hacia ellos en las últimas semanas, después de que a comienzos de abril una presunta banda criminal siria asesinara a un responsable local del partido cristiano Fuerzas Libanesas. Entre las medidas anunciadas este miércoles por la Seguridad General también figuran amenazas de arresto contra aquellos libaneses que contraten o proporcionen un alojamiento a sirios sin residencia legal, así como el cierre de “todos” los establecimientos “ilegales” gestionados o financiados por refugiados. Además, suspendió la emisión de dos tipos de permiso de residencia y cambió los requisitos para un tercero, según la nota. El órgano también informó de que retomará los procesos de retorno “voluntario y seguro” a Siria, un tipo de campañas que ya se venían organizando en los últimos años con un número limitado de participantes. Las nuevas restricciones llegan apenas una semana después de que la Unión Europea anunciara un paquete de ayuda al Líbano por valor de 1.000 millones de euros hasta 2027, parte de ellos dirigidos a lidiar con la crisis de refugiados sirios. La cuantía fue asignada después de que Chipre promoviera un acuerdo con el Líbano en medio de un fuerte aumento en la llegada de embarcaciones con inmigrantes sirios a las costas chipriotas, la mayoría de ellos procedentes del territorio libanés. El paquete ha generado polémica en el Líbano.