Los representantes diplomáticos de varios países iberoamericanos aplaudieron hoy el avance e interés del español en el Líbano, en el marco de la celebración del Día del Libro.
Durante un acto celebrado en la Facultad de Lenguas y Traducción de la Universidad Libanesa (UL), ubicada en New Rawda, un barrio septentrional en las afueras de Beirut, algunos de los países iberoamericanos presentaron en varios expositores los libros de sus autores más emblemáticos
La directora de la facultad de letras de la institución, Zena Tohme, resaltó la importancia del libro, así como la necesidad de la educación, que significa “progreso y libertad”, y que da los medios para “poder hacer frente a la situación que se vive en esta parte del mundo como en otros continentes”.
Por su parte, el director del Instituto Cervantes, Juan Manuel Casado, felicitó a los estudiantes de español, subrayando “lo importante que es para nosotros” este interés.
“Esto significa que de esta universidad pública va a salir el futuro de la lengua española de este país y de la región”, agregó, y señaló que “la lengua es el medio de comunicación, lo que hace posible el diálogo para que la humanidad progrese”.
Tohme dijo a Efe que como primer idioma enseñan español, italiano y chino, mientras que como segundo es el árabe, francés, inglés, italiano, español, y otros idiomas.
“Con anterioridad, solo ofrecíamos el grado, aunque ahora también ofrecemos postgrados en español, porque este idioma está muy solicitado por los alumnos”, adujo.
La profesora de español Rita el Daher, de nacionalidad boliviana-libanesa, afirmó a Efe que “a pesar de que es un departamento nuevo en este universidad, funciona muy bien”.
Para la alumna Rosa Haddad, aprender el español le permitirá “su sueño de ir a España para perfeccionarlo, y también me da la opción de trabajar en la embajada de España, o bien como traductora”, aseguró.
En un país políglota como el Líbano, en el que las diferentes asignaturas se enseñan en árabe, francés e inglés, la lengua de Cervantes ha tenido que luchar para hacerse un hueco.
Su irrupción en los colegios públicos libaneses se convirtió recientemente en una realidad en el curso escolar, con un programa piloto implantado en diez centros educativos cuyo nacimiento requirió tres años de intensos contactos.