La Fuerza Aérea de Israel recibió sus primeros cazabombarderos invisibles F-35, de manufactura estadounidense, parte de un lote total que Tel Aviv espera que sea de unas 50 aeronaves.
De acuerdo con una nota del Ejército israelí, las aeronaves arribaron pilotadas por estadounidenses, y a partir de este martes volarán de manos de pilotos israelíes que se entrenaron en Estados Unidos.
El ministro de Defensa, Avigdor Lieberman, aseguró que esos aviones constituyen un nuevo componente en el mantenimiento de la superioridad aérea en nuestra región.
A juicio de expertos, la llegada de los F-35 a Israel conducirá a una probable escalada en las adquisiciones militares de las naciones más ricas de la región, las cuales, en caso que Washington se niegue a entregarles aviones similares, pudieran dirigir sus futuros pedidos a Rusia para aeronaves como el Sukhoi T-50.
Los F-35 son cazabombarderos monomotor diseñados por la empresa Lockheed Martin para evadir los radares de los sistemas de defensa aérea, así como obtener grandes cantidades de información con sus sensores, tanto activos como pasivos.
La entrega de estos aviones de combates es vista por analistas como un espaldarazo más a la política israelí en el Medio Oriente, más allá de discrepancias de forma entre Washington y Tel Aviv.