La esperanza de Estados Unidos de que la oposición moderada respaldada por Washington asuma el poder en Siria en el futuro, no estará presente si cae el este de Alepo. De esta manera interpreta Paul Pillar, uno de los más destacados ex-analistas de la CIA, la recuperación del control por el ejército sirio y sus aliados de los barrios orientales de al-Shahba, en manos de los grupos armados.
Este criterio se sustenta a partir de las continuas pérdidas de terreno que tienen los grupos armados en su enfrentamiento con el ejército sirio, no sólo en Alepo, sino a lo largo de toda la geográfica siria. Hoy los grupos armados tienen en su poder el 22% de la superficie del país levantino.
Desde la llamada “gran epopeya de Alepo”, iniciada a finales de 2015 por el control de esa ciudad, hasta la “Batalla de Abu Omar Sracb”, el 28 de octubre del 2016, con el objetivo de romper el cerco de los barrios orientales, las facciones armadas encabezadas por el llamado Ejército de Conquista no ha ganado más que miles de muertos y heridos, entre ellos comandantes de campo y funcionarios militares destacados.
Lo cierto es que la operación militar del ejército sirio y sus aliados, al este de Alepo, fue precedida por tres treguas humanitaria, dos momentos en el mes de octubre y la otra a principios de noviembre.
Durante las treguas, el ejército sirio ofreció corredores humanitarios seguros a rebeldes y civiles para abandonar las zonas en conflicto, pero los grupos armados, encabezados por el Frente al Nusra, rechazaron las treguas y no lo permitieron.
A partir de entonces, el ejército sirio y sus aliados decidieron recomenzar la ofensiva antiterrorista dentro de los barrios del este de Alepo. Esto obligó a la jefatura de Al Nusra a exigir la intervención militar directa turca en la ciudad, acción que evidenció el resquebrajamiento en las filas extremistas.
La derrota de los terroristas en la zona de las viviendas de Hanano tuvo un papel importante en el control de la parte norte de los barrios del este de Alepo.
Por temor a una repetición del escenario en la parte sur, las facciones armadas y sus representantes en Turquía acordaron replegarse para reducir la mayor pérdida posible en la parte restante de Alepo.
Con la liberación completa de los barrios del este de Alepo, el ejército sirio lograra frustrar a los planes otomanos en esa región siria.
