El Gobierno israelí inició la evacuación de Amona, una emblemática colonia en Cisjordania, pero anunció paralelamente la construcción de nuevas viviendas en ese territorio palestino ocupado.
Los jóvenes incendiaron todo lo que hallaron a su paso, construyeron barricadas y con sus cuerpos bloquearon durante horas el paso de los agentes, y desafiaron a las fuerzas del orden cantando eslóganes como “Hoy me pasa a mí, mañana te pasará a ti”.
La colonia de Amona se encuentra cerca de Ramalah. La batalla política y legal duró desde su creación, en 1995, hasta que el Tribunal Supremo juzgó el asentamiento ilegal desde el punto de vista del derecho israelí al estar construida en tierras privadas palestinas.
Un diputado de la extrema derecha, Moti Yogev, cuyo partido Hogar Judío forma parte de la coalición gubernamental, declaró en la protesta que la destrucción de Amona era una mala decisión, pero que las nuevas casas anunciadas por el ministerio de Defensa eran una compensación.
Aunque las autoridades israelíes no han tenido más remedio que evacuar Amona, están aprovechando la nueva situación favorable con la llegada de Trump a la Casa Blanca para multiplicar sus medidas de colonización.
Nabil Abu Rudeina, portavoz de la presidencia palestina, denunció una campaña feroz de colonización israelí que viola el derecho internacional, e instó a la administración estadounidense a que frene esta política que busca destruir el proceso de paz.
Amona: un símbolo
La colonia de Amona se ha convertido en los últimos años en un símbolo para los partidarios del Gran Israel, quienes consideran que Cisjordania les pertenece.
Amona fue creada en 1995 en los altos del asentamiento de Ofra, al norte de Ramalah como sitio arqueológico. Casi enseguida, a partir de 1997, se instalaron a vivir allí jóvenes colonos judíos.
Dicen que Amona es ilegal porque fue construida en tierras privadas pertenecientes a palestinos con títulos de propiedad válidos para las autoridades israelíes.
A partir de una sentencia de la Corte Suprema de 1979, las colonias israelíes deber ser construidas solamente en tierras de propiedad del Estado y no en terrenos privados sin el acuerdo de sus legítimos propietarios.
¿En qué Amona es emblemática?
Amona se convirtió en una colonia emblemática puesto que la decisión de evacuarla de la Corte suprema forzó al gobierno a compensar a los colonos, autorizando miles de nuevas construcciones y a intentar hacer votar una nueva ley favorable a la colonización.
El texto de esta ley, actualmente en examen por parte del Parlamento, permitiría legalizar en una primera etapa casi 4 mil viviendas construidas en colonias “legales” o “salvajes” en tierras privadas palestinas.
El Derecho internacional no distingue entre estas categorías de colonias puesto que las considera a todas ilegales.