Tras ocho días de protestas contra la crisis económica el Ejército de Líbano empieza a desbloquear las carreteras.

El Ejército de Líbano ha anunciado este miércoles el inicio de operaciones para desbloquear las carreteras cerradas con barricadas tras ocho días de protestas a nivel nacional contra la grave crisis política y económica en la que se encuentra sumido el país desde hace meses.

“Como resultado de los trágicos accidentes y abusos que han tenido lugar y para preservar la seguridad de los ciudadanos,unidades del Ejército han empezado a abrir las carreteras cerradas”, ha señalado el Ejército libanés a través de su cuenta en la red social Twitter.

unidades del Ejército han empezado a abrir las carreteras cerradas”, ha señalado el Ejército libanés a través de su cuenta en la red social Twitter.incluida la autovía que conecta Naamé con la capital, Beirut, y la de Trípoli (norte), según ha recogido la agencia estatal libanesa de noticias, NNA.

El Ejército de Líbano empieza a desbloquear las carreteras tras ocho días de protestas contra la crisis económica

La intervención del Ejército ha llegado después de que el presidente libanés, Michel Aoun, pidiera a las Fuerzas Armadas que procedieran a poner fin a los bloqueos, que se han sucedido desde hace más de una semana.pidiera a las Fuerzas Armadas que procedieran a poner fin a los bloqueos, que se han sucedido desde hace más de una semana.

Líbano, que afronta su peor crisis económica desde la guerra civil (1975-1990), se halla con un Gobierno en funciones desde agosto a raíz de la dimisión de Hasán Diab días después de las explosiones del 4 de agosto en el puerto de Beirut, que dejaron más de 200 muertos y 7.000 heridos.

A ello se ha sumado durante los últimos días una caída de la moneda libanesa que ha provocado además retrasos en las importaciones de combustible, lo que ha incrementado los cortes eléctricos, que en algunas zonas llegan a ser de doce horas al día.

Pese a la gravedad de la situación, las conversaciones sobre la formación del nuevo Gobierno permanecen bloqueadas, en medio de las tensiones entre Aoun y el primer ministro designado, Saad Hariri, lo que ha llevado a Diab a amenazar con poner fin a sus funciones si así ayuda a facilitar un acuerdo.