Presidente Aoun: Todos estamos llamados a acompañar las aspiraciones de Su Santidad y de los amigos del Líbano para recuperar los valores y la esencia de nuestra presencia, por la cual merecemos ser y seguir siendo la “Nación del Mensaje”.

Esta mañana, el Presidente de la República, General Michel Aoun, ha seguido por televisión y en directo desde el Vaticano, los actos de apertura del Papa Francisco de la “Jornada de meditación y oración por el Líbano”, convocada por el Santo Padre, con la participación de los jefes de las iglesias católicas, ortodoxas y cristianas evangélicas del Líbano, en un momento en el que se elevaban las oraciones por la salida del Líbano de su actual crisis.

El Papa subrayó la necesidad de unirse espiritualmente con los líderes de las iglesias del Líbano para orar para que el Líbano salga de la peligrosa crisis por la cual atraviesa, y muestre al mundo su rostro, el rostro de la paz y la esperanza.

Previamente, esta misma mañana, el presidente Aoun pidió a los libaneses de todas las confesiones que consideren este día como un punto de partida para revivir todos los elementos que constituyen los mensajes del Líbano a su alrededor y en el mundo, que es el mensaje de vivir juntos en armonía basándose en el reconocimiento de los derechos, el respeto mutuo y el equilibrio.

Por su lado, el presidente Aoun declaró: “Su Santidad el Papa Francisco llamó hoy al mundo a orar y a meditar por el Líbano, y dedicó un día especial a nuestro país en la Santa Sede. Todos estamos llamados, cada quien desde su posición actual, a cumplir con las aspiraciones de Su Santidad y los amigos del Líbano en el mundo, para recuperar los valores y la esencia de nuestra presencia, por la cual merecemos ser y seguir siendo la nación del mensaje”.

El presidente Aoun se dirigió en particular a la juventud libanesa diciéndoles: “vivo las enormes inquietudes que tienen ante las dificultades actuales, pero tengo gran confianza y seguiré trabajando con fe y convicción de que con nuestra voluntad común podamos afrontar todos los desafíos, las dificultades y las crisis, y de que saldremos más fuertes de ellos, tome el tiempo que sea. Que las miradas del mundo que nos observan hoy, sean un fuerte incentivo para dar más para sacar al Líbano de su estancamiento, y para consolidar los cimientos de su resurrección”.