Comienza la evacuación de un grupo armado y sus familiares del Líbano a Siria

Beirut, 13 ago (EFE).- La evacuación de unos 400 militantes del grupo armado sirio Saraya Ahl al Sham, de sus familiares y otros civiles desde el Líbano a Siria comenzó hoy tras su suspensión el sábado.

Las fuerzas de seguridad libanesas han comenzado a preparar la salida de los extremistas desde Uadi Hmeid, en la región de Arsal, situada en una zona montañosa y fronteriza con Siria, en el noreste del Líbano, según informa la Agencia Nacional de Noticias (ANN).

Decenas de autobuses han llegado en las últimas horas a este área para transportar a los evacuados, que está previsto que se dirijan a la ciudad de Al Ruhaiba, ubicada en la región de Al Qalamún Oriental, en Siria.

Según la ANN, la Cruz Roja libanesa acompañará a los vehículos hasta la frontera entre el Líbano y Siria.

La operación tenía que haber comenzado primera hora de hoy pero fue pospuesta unas horas debido a que el grupo afiliado al Ejército Libre Sirio (ELS) no había dado su visto bueno definitivo al plan de evacuación, según la televisión libanesa LBCI.

El acuerdo se negoció de forma paralela al proceso que permitió hace dos semanas la retirada a territorio sirio de cerca de 7.000 personas, incluyendo combatientes de la exfilial siria de Al Qaeda y sus familiares.

Sin embargo, el sábado se paralizó el proceso de salida porque Saraya Ahl al Sham se negaba a abandonar la zona porque -según explicó en un comunicado- no se estaba aplicando “lo acordado tras diez días de negociaciones dirigidas por el general Abas Ibrahim”, jefe de la Seguridad Nacional libanesa.

Los acuerdos de evacuación se alcanzaron después de un alto el fuego en Arsal, tras una semana de combates entre Hizbulá y la exfilial de Al Qaeda, en los que también participó Saraya Ahl al Sham al lado de los yihadistas.

En los últimos días el ejército libanés ha comenzado a bombardear y a atacar con artillería posiciones del grupo terrorista Estado Islámico (EI), que también tiene presencia en la zona fronteriza. EFE